Crítica: Luna nueva

Sencillamente sublime. Así es como describiría a la nueva entrega de la saga Crepúsculo. Se suele decir que las películas basadas en novelas siempre dejan mucho que desear. Que "está mejor el libro" y que siempre hay invenciones y partes de la historia que se pierden. Me considero una seguidora de las novelas de Stephenie Meyer, y también me gustan las películas pero también he de ser justa. Si bien Crepúsculo no fue del todo lo que yo me esperaba, he de reconocer que Luna Nueva ha sido maravillosa.

Es sin duda mucho más fidedigna a la novela que Crepúsculo. Quizás lo único que se les ha escapado un poco de las manos es una escena en la que Bella (Kirsten Stewart) se hace un corte en el dedo con el papel del envoltorio de uno de sus regalos el día de su cumpleaños, estando en casa de Edward (Robert Pattinson). No obstante, esto es lo más "hollywoodiense" y "peliculero" de todo el filme, porque incluso las escenas cumbre de la película no están tan dramatizadas como en la entrega anterior.

Los efectos especiales han mejorado, y también la narrativa audiovisual es de mejor calidad. Uno no se siente perdido a lo largo de la película, algo que sí sucedía en Crepúsculo. La banda sonora continúa siendo excelente, y las actuaciones de los intérpretes son algo digno de mencionar. La actuación de Taylor Lautner (Jacob Black, en la película) nos descubre un potencial escondido, y nos sumerge de lleno en la historia. El personaje de Jacob no era precisamente mi favorito y, al ver la película, he podido empatizar totalmente con sus sentimientos.

Por otra parte, Robert Pattinson (Edward Cullen) es sin duda el buque insignia de toda la película. Solo aparece al principio y al final del filme, pero su actuación es muy intensa. Uno puede sentir el sufrimiento de Edward, el amor que siente por Bella y, al mismo tiempo, la tristeza y la preocupación que conllevan el hecho de que también sienta deseos de matarla. Son sentimientos contrarios e ilógicos que Pattinson ha conseguido reflejar e interpretar mucho mejor en esta nueva entrega.

Sin duda, es una película que recomiendo a todo el mundo. Te guste más o te guste menos la historia, seas más o menos seguidor de la saga, ésta entrega no deja indiferente a nadie (sobre todo por el final que tiene). Y es que si Crepúsculo trataba sobre el amor idealizado, Luna Nueva trata sobre el desengaño amoroso, y sobre el amor real. El sufrimiento, la soledad, la culpabilidad y, sobre todo, el amor como algo difícil son los temas que podemos ver reflejados en Luna Nueva.

Nota: 9